martes, 17 de abril de 2012

FELICIDADES MAMÁ

Mamá:
No sé ni como empezar esta carta. Me gustaría que hubiera algún modo de saber que puedes leerla; que ahí donde estás ahora, te llega mi felicitación.
Ayer hizo dos meses desde que te fuiste con papá y probablemente lo hiciste para no tener que celebrar otro cumpleaños. Sé que nunca te gustaron, que odiabas que te regaláramos cosas y sabías que este año, al ser setenta y cinco los que cumplías, el regalo iba a ser especial. Y sí mamá, tienes regalo especial: estás con papá y nosotros seguimos aquí, juntos, unidos, como a ti te gustaba.
Es el mejor regalo que te puedo ofrecer, decirte que continuamos con nuestras vidas pero que estamos juntos, que ese amor que hiciste que existiera entre los cuatro hermanos no se ha roto, que nos llamamos, quedamos para comer y tus nietos pueden jugar juntos.
Pero te echo tanto de menos mamá, me haces tanta falta que me sigo sintiendo esa niña pequeña en que me transformaba cada vez que, hablando de lo que fuera, me acariciabas el pelo. Es extraño que ese recuerdo sea lo que más me duela, que no me guste ahora que nadie me toque el pelo, porque sólo tú sabías hacerlo, porque había tanto amor en aquellas caricias, porque aquellos eran nuestros momentos.
Mamá. aunque sea tu cumpleaños, tengo que decirte que estoy enfadada contigo porque te fuiste demasiado pronto, demasiado joven y nos quedaban muchas cosas por hacer juntas. Seré egoísta al decírtelo, pero no puedo evitarlo y no consigo hacerme a la idea de que ahora tengo que pensar "qué habría hecho mamá" en lugar de coger el teléfono y llamarte, porque no hay nadie al otro lado.
Mami, sólo quiero decirte que espero que pases un día de cumpleaños maravilloso, con papá, con tus padres, con todos aquellos que se fueron antes que tú y que te esperaban y te reclamaban. Hoy no voy a regalarte nada, porque tu recuerdo está presente en todos los momentos de mi vida, porque cada día miro al cielo y sé que estás ahí, ayudándome, dándome todo tu amor y estirando tu mano para acariciarme el pelo y yo cerraré los ojos y sentiré esas caricias y sonreiré y lloraré.
Espero ser la persona que me enseñaste a ser, demostrarte cada día que tu esfuerzo no fue en vano y que, desde ese balcón privilegiado en el que estás, puedas sentirte orgullosa de mí, porque soy lo que soy gracias a ti y a papá, a vuestras palabras y a vuestro ejemplo.
Felicidades mamá.
Te quiero.

3 comentarios:

  1. Lo siento Pilar. Un beso enorme. Liberto.

    ResponderEliminar
  2. Es hermoso el recordar con ese amor todo aquello oe unía. Bello relato de acorde con todo lo que escribes .Felicidades por ser así

    ResponderEliminar